Asesorías y Despachos Profesionales

La confianza: un valor diferencial para los despachos profesionales (e-book)

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En todos los negocios, la confianza es importante, pero, en un despacho profesional, es no solo un factor diferencial, sino la razón de ser del asesor. Un mal vendedor puede vender un buen producto, si este se vende solo, pero un despacho profesional tiene que emanar confianza, el cliente tiene que palparla y si esta si se pierde por una mala gestión, recuperarla puede ser una tarea sumamente compleja.

La confianza no solo se debe transmitir. El asesor también debe de tener confianza en sí mismo, modernizar sus sistemas para ofrecer un valor añadido y buscar nuevos caminos que explorar para mejorar el servicio a sus clientes. En este sentido, contar con un socio comercial innovador como Sage, que ofrece todo tipo de aplicaciones de gestión para los despachos, desde aplicaciones en la nube, conectividad y software adaptado a diferentes tipos de negocio, puede suponer una evidente ventaja competitiva para los profesionales de los despachos.

Y es que, además de la confianza, uno de los mayores retos para los próximos años para muchos sectores, entre los que se encuentran los despachos profesionales, es su transformación y adaptación a las nuevas tecnologías, ya que en un mundo en el que el 90% de las personas utilizan smartphones como elemento de comunicación y los nativos digitales o millennials no conciben estar desconectados, el poder facilitar información online en todo momento será un factor crítico para el éxito de los despachos.

Sucesos relevantes y retos de cara al futuro de los despachos profesionales

Los sucesos más relevantes en el sector de los Despachos Profesionales tienen que ver con:

  • La anulación de las comisiones de las mutuas.
  • La eliminación total o parcial de las tasas judiciales (que cuentan con una gran oposición también entre los profesionales de la asesoría).
  • La modificación del estatuto de los socios profesionales.
  • El sistema CRETA.
  • El estado del sistema político en general (incertidumbre política, corrupción…).
  • Los defectos de las reformas y los excesivos cambios legislativos que, en opinión de algunos asesores, llega incluso a generar inseguridad jurídica.

Mirando al futuro, muchos asesores consideran que sus propios despachos tienen desafíos a los que enfrentarse, desde aspectos generales, como aumentar la facturación, incrementar la cartera de clientes y ganar cuota de mercado, hasta aspectos más específicos tales como:

  • La adaptación tecnológica, que permita mejorar la productividad, eficacia y eficiencia, así como ganar notoriedad y clientes mediante la utilización de redes sociales, entre las cuales LinkedIn se perfila como una de las más adecuadas debido a la facilidad de esta red para identificar potenciales clientes.
  • La ampliación de la cartera de servicios para ganar clientes y mejorar los niveles de facturación. En este sentido, esta es una demanda de los clientes, siempre y cuando sus necesidades sean atendidas por personal experto en cada una de las materias.
  • Mejorar la capacitación de la propia plantilla, tanto en materia tecnológica, como en el reciclaje de contenidos técnicos y profesionales.
  • Mejorar la calidad en el servicio, el trato con el cliente y la comunicación con el mismo, como polos de competitividad que además contribuyen a aumentar el nivel de fidelización de la propia cartera de clientes. En este sentido, los clientes expresan el deseo de tener una mayor conexión con su asesor, para que éste conozca de forma personalizada la empresa o negocio, de tal modo que el asesor y/o asesores sea capaz de anticipar sus necesidades ante nuevas coyunturas, sobre todo derivadas de cambios legislativos que les puedan afectar.
  • Ofrecer asesoría tecnológica, sobre todo si se suman los servicios relacionados con soluciones de software, nuevas tecnologías y protección de datos.